Lectura del día

Novena al Santo Cura de Ars

Novena al Santo Cura de Ars


Por la señal ✠ de la Santa Cruz, de nuestros ✠ enemigos, líbranos Señor ✠ Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo.
Amén.

ACTO DE CONTRICCIÓN

Dulce Jesús de mi vida, prenda de mi corazón, a tus pies yo me arrodillo y te pido perdón, te pido de penitencia me des la absolución, por si este día, esta noche, me muero; me sirva de confesión.
Que el padre me dé su gracia, y el hijo su bendición, que la Santísima Virgen María me conforte, por si a la hora de mi muerte no puedo pedir perdón, ahora te lo pido con un acto de contrición:

Jesús, mi Señor y Redentor: Yo me arrepiento de todos los pecados que he cometido hasta hoy, y me pesa de todo corazón, porque con ellos, ofendí a un Dios tan bueno. Propongo firmemente no volver a pecar, y confío en que, por tu infinita misericordia, me has de conceder el perdón de mis culpas y me has de llevar a la vida eterna.
Amén.

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

Te amo, Oh mi Dios. Mi único deseo es amarte, hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Oh infinitamente amoroso Dios, y prefiero morir amándote que vivir un instante sin Ti.
Te amo, oh mi Dios, y mi único temor es ir al infierno, porque ahí nunca tendría la dulce consolación de tu amor. Oh mi Dios, si mi lengua no puede decir cada instante que te amo, por lo menos quiero que mi corazón lo repita cada vez que respiro.
Ah, dame la gracia de sufrir mientras que te amo, y de amarte mientras que sufro, y el día que me muera.
No solo amarte pero sentir que te amo. Te suplico que mientras más cerca estés de mi hora final aumentes y perfecciones mi amor por Ti.
Amén.

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Primero | 26 de Julio

Fe ardiente

San Juan María Bautista Vianney, tú naciste de una madre profundamente religiosa; de ella recibiste la santa Fe, aprendiendo a amar a Dios y a rezar. Ya a temprana edad se te pudo ver arrodillado delante de una estatua de María. Tu alma fue arrebatada de forma sobrenatural hacia las cosas más elevadas. A pesar del alto coste, respondiste a tu vocación.

Contra muchos obstáculos y contradicciones tuviste que luchar y sufrir para llegar a ser el perfecto cura que fuiste. Pero tu espíritu de profunda fe te sostuvo en todas estas batallas. Oh gran santo, tú conoces el deseo de mi alma. Quisiera servir a Dios mejor. De Él he recibido muchas buenas cosas. Por esto, obtén para mí más valor y especialmente una profunda fe.

Muchos de mis pensamientos, palabras y acciones son inútiles para mi santificación y mi salvación porque ese espíritu sobrenatural no impulsa mi vida. Ayúdame a ser mejor en el futuro.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR LA FE

Derrama en mi alma, oh Dios, por la intercesión de San Juan María Vianney, pastor de Ars, una fe viva y cordial. Esa fe será mi salvación, como fue la salvación de todos los santos que están en el Cielo.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Segundo | 27 de Julio

Completa confianza en Dios

San Juan María Bautista Vianney, ¡cuanta confianza tenía la gente en tus oraciones! No podías abandonar tu vieja rectoría o tu humilde iglesia sin verte rodeado por almas implorantes, que recurrían a ti al igual que hicieron al mismo Jesús durante su vida terrenal. Y tu, oh buen santo, les dabas esperanza con tus palabras que estaban llenas de amor para Dios.

Tú, que siempre confiabas enteramente en el corazón de Dios, obtén para mí una confianza filial y profunda en su Providencia. Así como la esperanza de bienes divinos llena mi corazón, dame valor y ayúdame a obedecer siempre los mandamientos de Dios.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR LA ESPERANZA

Dame, oh Señor, esa esperanza que elevó el espíritu de San Juan María Vianney, esa esperanza que le dio paciencia en el largo de su sufrimiento. Él lo hizo todo con la esperanza que tu gloria sea aumentada. Infunde en mi corazón el deseo de hacer buenas obras en tu nombre.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Tercero | 28 de Julio

Verdadero amor al prójimo

San Juan María Bautista Vianney, por causa de tu amor a Dios mostraste una gran caridad hacia tu prójimo. No podías predicar el amor de Dios sin derramar lágrimas de amor. Durante tus últimos años parecía como si no pudieras hablar acerca de otra cosa o vivir para cualquier otra cosa. Así te sacrificaste a ti mismo por tu prójimo mediante el consuelo, la absolución y santificándoles hasta el límite de tus fuerzas.

Tu caridad me inspira a un mayor amor a Dios, un amor que se muestra más por los hechos que por las palabras. Ayúdame a amar a mi prójimo con igual generosidad a como Cristo los ama.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR EL AMOR A DIOS

Oh Dios mío, te amo con todo mi corazón y sobre todas las cosas porque Tú, oh Dios, eres el Sumo Bien, y porque tus propias perfecciones infinitas son dignísimas de todo amor.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Cuarto | 29 de Julio

Horror al pecado

San Juan María Bautista Vianney, tú fuiste tan inflexible contra el pecado, y sin embargo tan amable y dispuesto a acoger al pecador. Acudo a ti hoy como si aún estuvieras vivo, como si estuviera arrodillado ante tus pies y pudieras oírme. Inclínate hacia mí, escucha al confidente arrepentido por las debilidades y acciones miserables.

Sacerdote del Señor, infatigable confesor, obtén para mí el horror al pecado. Tú quisiste sobre todo que evitáramos la ocasión de pecar. Quiero tomar tu consejo y hacer la resolución de romper con los malos hábitos y evitar las ocasiones peligrosas de pecar. Ayúdame hoy a examinar mi conciencia.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN PARA OBTENER EL AMOR A NUESTRO PRÓJIMO

Querido Jesús mío, amador de todos los hombres, enséñame a amar a mi prójimo como Tú amaste incluso a tus enemigos. San Juan María Vianney fue tu fiel seguidor en la práctica de esta virtud. Él amó a las almas. Que me consuma también, por una devoción a él, el mismo amor por las almas.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Quinto | 30 de Julio

Confesor de almas

Oh Santo Cura de Ars, tú sabías cuán importante es una buena confesión para la vida cristiana. Para procurar felices frutos a millones de almas era por lo que aceptabas estar en un incómodo confesionario, que era como una prisión, hasta 15 y 16 horas en ciertos días.

Voy a intentar a desarrollar el hábito de la confesión frecuente, a prepararme adecuadamente cada vez y a tener siempre arrepentimiento de mis pecados, para que así la gracia de la final perseverancia y también la santificación de mi alma sean aseguradas. Pide por mí este gracia.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR LA HUMILDAD

Oh dulce y humilde Jesús, dame también la preciosa virtud de la humildad, la cual diste tan abundantemente a tu siervo San Juan María Vianney, para que también pueda ser agradable a tu vista y agradable ante los hombres. Nunguna virtud es tan atrayente como la humildad. Tú, oh Señor, exaltas a los humildes. Ser grande ante tu vista y aprobado por Ti es el objeto de mi deseo.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Sexto | 31 de Julio

Presencia real

Oh Santo Cura de Ars, cuyo único consuelo en este mundo era la presencia real de Jesús en el tabernáculo, ¿acaso no era tu gran felicidad distribuir la comunión a los peregrinos que te visitaban?. Tu negabas la comunión a las almas que se negaban a reformarse, pero a las almas de buena voluntad les abrías de par en par las puertas de la fiesta de la Eucaristía.

Tú, que cada día en la Santa Misa recibías la Santa Comunión con gran amor, dame algo de tu fervor. Libre de pecado mortal, obtén para mí un sincero deseo de beneficiarme al recibir la Santa Comunión.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR LA POBREZA

Señor, Tú has dicho: “Bienaventurado el que piensa en los pobres”. Que yo tenga ese conocimiento, que es el camino práctico para mostrar mi amor al prójimo en dificultad. Que, como Tú, sea también un buen samaritano haciendo el bien y socorriendo a quien lo necesite. No sólo debo ser pobre en el espíritu, sino qu también debo amar ser pobre en realidad, porque los pobres son los hermanos de Cristo.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Séptimo | 1 de Agosto

Ahuyentador del demonio

Oh Santo Cura de Ars, los infames ataques del demonio que tuviste que sufrir y las pruebas que te desalentaban hasta la fatiga no te hicieron abandonar la sublime tarea de convertir las almas. Durante muchos años el demonio vino a interrumpir tu corto descanso, pero tú ganaste gracias a la mortificación y las oraciones.

Poderoso protector, tu conoces bien el deseo del tentador por dañar mi alma bautizada y creyente. El quisiera verme pecar rechazando los Santos Sacramentos y la vida de virtud. Buen santo de Ars ahuyenta de mi toda traza del enemigo.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN PARA OBTENER LA GRACIA DE LA MORTIFICACIÓN

Tú, Señor, desde el comienzo has mandado la mortificación de la carne. Desde el comienzo, los deseos de la carne han sido el bane de una vida piadosa. Cuando consiga tu gracia, oh Señor, inspírame con al gún grado de esta firmeza y fiel adhesión a Ti. No sufras que mi corazón sea vencido por esa inconstancia que es tan natural a él, ni permitas que mi vida sea una perpetua sucesión de malas prácticas e infidelidades. Concédeme que mi corazón sea todo tuyo, todo el tiempo y para siempre. Y que por la mortificación pueda merecer la bienaventuranza eterna.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Octavo | 2 de Agosto

Pureza exquisita

Tú edificaste a tantos otros: la modestia y la exquisita pureza radiaban de tu cuerpo. Con ese encanto y con ese entusiasmo predicaste a otros acerca de esas bellas virtudes que tu decías se asemejaban al perfume de un viñedo en flor.

Por favor yo te imploro que unas tus súplicas a las de María Inmaculada y Santa Filomena para que siempre guarde, tal y como Dios me pide, la pureza de mi corazón. Tú, que has dirigido a tantas almas hacia las alturas de la virtud, defiéndeme en las tentaciones y obtén para mí la fortaleza para conquistarlas.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN POR UN VERDADERO ESPÍRITU DE DEVOCIÓN

Cuán dulce, oh Señor, respirar solamente tu amor y decirte con todo mi corazón: ¡Mi Dios y mi todo! ¡Concédeme que esas palabras puedan entrar en mi alma! Haz pues, imprimirlas en tal modo sobre mi mente y mi corazón, para que pueda entenderlas y practicarlas. Que yo sea devoto a la oración. Haz que mi delectación sea conversar contigo, que ore por todo lo que necesite y ante toda empresa, para que con la oración pueda empezar toda obra y sea felizmente concluida con la oración. Tú eres mi Salvador. Que yo te posea en la oración aquí en la tierra, y que seas Tú mi porción por toda la eternidad en el Cielo.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

Novena al Santo Cura de Ars ~ Día Noveno | 3 de Agosto

Deseo del Cielo

Oh Santo Cura de Ars, tus restos preciosos están guardados en un magnífico relicario, donación de los sacerdotes de Francia. Pero esta gloria terrena es sólo una pálida imagen de la gloria indescriptible que estás disfrutando con Dios. Durante el tiempo que permaneciste en la tierra solías repetir en tus horas de abatimiento: “ya descansaré en la otra vida”. Ahora ya está hecho: gozas la paz y felicidad eternas.

Deseo seguirte algún día. Pero hasta entonces, te oigo diciéndome: “debes trabajar y luchar mientras estés en el mundo”. Enséñame pues a trabajar por la salvación de mi alma, a difundir la Buena Nueva, el buen ejemplo y a hacer el bien a los que me rodean y así poder recibir la felicidad de los elegidos contigo.
Amén.

Santo Cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión.

ORACIÓN A MARÍA SANTÍSIMA

Mi querido Salvador, Jesucristo, Hijo de la Virgen María, concédeme la gracia de amar a tu Madre. Esta gracia es tal distinción, tal gracia de salvación, que debo tenerla por todos los medios. Dios te salve, Santa Reina y Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra. A ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A Ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Vuelve, graciosísima abogada, tus ojos de misericordia hacia nosotros, y después de este destierro muéstranos el fruto bendito de tu vientre. Oh amantísima, piadosísima y dulcísima Virgen María. Ruega por nosotros, oh Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

¡Oh San Juan Vianney, patrón de los sacerdotes,
ruega por nosotros y por todos los consagrados!

ORACIÓN

Santo cura de Ars, tengo confianza en tu intercesión por todos los sacerdotes, por todas las personas que han consagrado su vida entera al servicio y al encuentro con Dios, mediante su hijo Jesucristo.
En este momento ponemos en oración a todos los sacerdotes que se han consagrado enteramente a Tí Señor, a todos los que se encuentren en crisis vocacional, a todos los que en este momento están a punto de ser ordenados.
Ilumina a todos los jóvenes que estén pensando en integrarsen a un seminario. También, pedimos por la purificación del clero, Señor Jesús, purifica a tus sacerdotes, purificalos de todo pecado, de toda mancha, sánalos definitivamente y esperemos tener sacerdotes santos y así podamos tener un pueblo que nos esforcemos por seguirte y por amarte.
Te queremos entregar a esos sacerdotes que son víctimas de la tibieza espiritual, que están pensando en dejar su vocación sacerdotal; tómalos Señor, y oramos por ellos de manera especial.
Amén.

Padre Nuestro..., Dios te Salve María..., Gloria...

BENDICIÓN FINAL

   Dulce Madre, no te alejes, tu vista de nosotros, no apartes, ven con nosotros a todas partes y solos nunca nos dejes; y ya que nos amas tanto como verdadera Madre, haz que nos bendiga: el Padre, el Hijo , y el Espíritu Santo. Amén.